Pocas cosas duelen más en el fútbol que enredar puntos por un gol de rival a última hora. La frustración de tener un resultado a la mano pero perderlo cuando estaba casi listo es grande, pero lo ocurrido este domingo en Holanda asoma un poco exagerado.

Feyernoord sufrió un gol en el quinto minuto de descuento y terminó empatando con el Twente de Felipe Gutiérrez, en partido válido por la liga holandesa. Este postrero tanto no fue bien aceptado por el delantero del equipo de Rotterdam, Graziano Pellè, quien no encontró nada mejor que repartir patadas a todo lo que se le pusiera por delante.

El atacante inició su camino lleno de ira pateando el banco de los veedores del partido, para luego, pese a los intentos por calmarlo, emprenderlas contra una puerta e incluso unos focos de la transmisión televisiva. Claramente el pobre Pellè no se tomó el gol de la mejor manera y se espera que sea sancionado por el incidente.

Te dejamos con el momento de ira del jugador de Feyenoord

http://youtu.be/vBI-OwoUwGk