El misionero australiano de 75 años detenido esta semana en Corea del Norte había dejado folletos religiosos en un templo budista y fue denunciado a las autoridades por su guía norcoreano, indicó el jueves su compañero de viaje.

John Short, oriundo de Melbourne y afincado en Hong Kong, fue detenido el lunes por la policía en su hotel de Pyongyang, acusado de haber repartido literatura religiosa, había indicado el miércoles su esposa, Karen Short.

Según la televisión pública Australian Broadcasting Corporation, viajó a Corea del Norte con un chino, Wang Chong, también cristiano, que pudo regresar a Pekín.

Según ese hombre, John Short fue detenido por dejar en un templo budista folletos que promueven el cristianismo.

Durante ese viaje muy controlado, como todas las visitas turísticas a Corea del Norte, los guías “nos llevaron a visitar un templo encima de una montaña. Una estatua de Buda estaba rota y la puerta del templo estaba dañada”, declaró Wang Chong a ABC.

Los guías “no estaban contentos de que lo hubiéramos visto. Sacamos fotos. Nos pidieron que las borráramos y así lo hicimos (…) Short estaba muy apenado y dejó unos folletos sobre el Evangelio”, añadió.

El guía norcoreano contó lo sucedido a la policía, fue registrado el equipaje de John Short y descubrieron material religioso en coreano.

John Short vive en Asia desde hace 40 años y en Hong Kong dirige una editorial que difunde calendarios, biblias y folletos en chino y otras lenguas, había dicho su esposa.

La libertad religiosa está inscrita es la Constitución norcoreana pero es puramente teórica y las actividades religiosas están estrictamente limitadas.

En Corea del Norte lleva detenido más de un año en un campo de trabajo el evangelista estadounidense de origen norcoreano Kenneth Bae.