La empresa Arauco trabaja en la definición del programa de financiamiento para iniciar las obras de la ampliación de la planta de celulosa Horcones, aprobada tras casi dos años de evaluación de su estudio de impacto ambiental. Organizaciones de la comuna, en tanto, creen que las exigencias planteadas a la forestal no son suficientes para evitar el daño que provocará este proyecto en la comuna.

Según Charles Kimber, gerente de asuntos corporativos de Arauco, el permiso ambiental es un hito para avanzar en los próximos pasos de esta inversión relevante para la provincia, y aseguró que se hizo un trabajo minucioso con los más altos estándares técnicos y de participación ciudadana.

Sin embargo, las organizaciones ciudadanas que se opusieron desde un comienzo a la iniciativa, dicen que el temor se mantiene, pues Horcones se va a convertir en una planta gigantesca que va a triplicar su producción de celulosa a más de dos mil toneladas anuales.

Virginia Pérez, presidenta de Laraquete Sustentable, señala que la experiencia de 40 años de esta industria vecina les tiene convencidos de que nada bueno puede significar para la comuna este mega proyecto.

Asimismo, sostiene que se opusieron con fuerza, pero que el proyecto fue aprobado extrañamente en un día de febrero cuando habitualmente no hay sesiones de la comisión evaluadora regional, donde de hecho varios seremis no estaban.

No obstante, indica que les queda la conformidad de que algo positivo se debe haber sacado de las más de 1.400 observaciones ciudadanas que recibió la iniciativa, pero estiman insuficiente que se destinen 18 millones de dólares a inversión ciudadana, cuando la nueva planta cuesta más de dos mil millones de dólares.

Nuevo Horcones estaría operativo dos años después de iniciada su construcción. En las próximas semanas, el directorio de la empresa debe aprobar el programa de financiamiento de este proyecto e iniciar los trámites de permiso de edificación en el municipio de Arauco.