Al parecer, desarraigar por completo la serie de imposiciones que el nazismo instaló en la sociedad alemana de mediados del Siglo XX aún es tarea pendiente para la clase política teutona. Así lo demuestra su legislación actual, que exhibe una particularidad que instó a un grupo de abogados a unirse en pos de su modificación.

Se trata de la ley que castiga el atentado contra la vida ajena y señala notorias diferencias para un mismo acto en diferentes circunstancias. Según explica BBC Mundo, tal estatuto “hace que las mujeres que matan a sus esposos abusivos probablemente pasen más años en la cárcel, condenadas por asesinato, que los miles de hombres que matan a sus esposas a golpes”.

Lo anterior, ya que los ideólogos del cuerpo legal nazi establecieron que asesino era todo aquel que mataba a “traición” o “insidiosamente”, lo que significa, arguye el portal, que si un hombre golpea a su esposa durante años y la mata, “tiene menos probabilidades de ser condenado por asesinato que por homicidio”.

Diferencias entre asesinato y homicidio

Para la ley vigente en Alemania, el asesinato se remite, entre otras, a las características mencionadas, mientras que el homicidio carece del componente “traicionero”, es frontal, directo y puede ser anticipado.

Para el primer caso, la condena respectiva es cadena perpetua, mientras que para el segundo es notoriamente menor y alcanza un promedio de 5 años en prisión.

La Asociación Alemana de Abogados (AAA) asegura que la ley nazi favorece a los denominados “fuertes” que matan a los “débiles”.

“En el código penal concerniente al asesinato, la persona es culpable de asesinato y no de homicidio si abusa de la indefensión de la víctima, abusando del hecho de que la víctima no anticipa ningún ataque”, señala el profesional Stefan Koenig en diálogo con BBC Mundo.

La delimitación de las circunstancias que envuelven la comisión del delito perjudica de manera particular a las mujeres que atentan contra sus parejas abusadoras, ya que, generalmente, optan por matar a su acompañante cuando éste no tiene posibilidad de anticipar un ataque.

Ello traerá consigo una condena por asesinato y un paso perpetuo por la cárcel.

Esta compleja situación ha sido denunciada por años luego de la figuración de casos emblemáticos en la opinión pública alemana -como el de Marianne Bachmeier y Armin Meiwes- y hoy reflota con fuerza en voz de la AAA, en una denuncia que promete traer un nuevo proceso de reflexión en torno al futuro de la potencia europea y su oscuro pasado bajo el gobierno hitleriano.