El cantante estadounidense Prince incendió el domingo la sala londinense Shepherd’s Bush Empire, donde unos 2.000 seguidores acudieron a un concierto sorpresa, el tercero en la capital británica desde el miércoles.
Al igual que el primer concierto celebrado el pasado miércoles en la sala londinense Electric Ballroom de Candem, la actuación de Prince el domingo se anunció con algunas horas de antelación.
Apenas una hora después del anuncio oficial en la radio BBC por el grupo 100% femenino 3RDEYEGIRL, que le acompaña desde hace un año, unas 150 personas esperaban ya a las puertas de la sala londinense, constató una periodista de la AFP.
“Cuando vi que iban a hacer un anuncio, me preparé para salir en el momento dijeran el nombre de la sala”, explicó un seguidor, que asegura haber visto a Prince en concierto “unas 30 o 40 veces”.
La espera de más de seis horas y el frío no desanimaron a nadie.
“Es Prince. Vale la pena”, dijo Neil, miembro de un grupo de fans que organiza una fiesta este verano para festejar los 30 años del álbum “Purple Rain”.
Las puertas se abrieron a las 19H15 y los seguidores se llevaron la grata sorpresa del precio del concierto: 10 libras (12 euros), en lugar de las 70 libras anunciadas oficialmente por la sala.
El público aclamó cada canción, cada solo de guitarra del cantante de Mineápolis.
El grupo osciló entre rock y funk con comodidad con canciones como “I Could Never Take The Place Of Your Man” o la más reciente “Plectrum Electrum”.
Entre canción y canción, el artista de 55 años bromeó sobre el reducido precio de las entradas. “Éste era el precio que pagaba cuando era joven para ver conciertos”, dijo Prince.
Los seguidores de Prince tienen más oportunidades de disfrutar de un concierto de su héroe, ya que el cantante prometió continuar en Londres durante todo el mes de febrero.
