China abrió su cuarta estación científica en el continente Antártico, una nueva etapa en la rápida consolidación de su presencia en la zona, donde ha previsto construir una nueva base de aquí a principios de 2015.

Con una forma que recuerda a un platillo volante sobre pilotes, la última estación china, bautizada Taishan, fue construida a 2.600 metros de altitud en trabajos que tardaron 53 días y que fueron llevados a cabo por un equipo de 28 personas, según la Administración de Estado de los Océanos citada por la agencia Xinhua.

La base sólo se utilizará en verano, de diciembre a marzo, en un lugar donde la temperatura media anual es de -36,6°C.

Cabe recordar que China posee ahora cuatro bases en el continente blanco austral: Changcheng (Gran muralla), Zhongshan, Kunlun y Taishan, a las que se sumará este año otra permanente, según anunció este lunes en un microblog la televisión estatal CCTV.