Niñas menores de 10 años están siendo enviadas a campos de iniciación sexual en Malawi. La situación preocupa a las organizaciones internacionales ya que muchas pierden su virginidad y luego son obligadas a casarse.
Las pequeñas son enviadas por sus padres a estos campamentos, en compañía de otras menores, y al llegar allá se les enseña cómo tener sexo, e incluso se les amenaza con que si no lo hacen contraerán “la enfermedad de la piel”.
Pero, ésta no es una práctica nueva. Durante generaciones las mujeres han sido sometidas a estas situaciones en que pasan la “prueba de honorabilidad” y así sus familias saben que serán aceptadas por los hombres adultos en el futuro, consignó el Daily Mail.
Durante su estadía en dichos campamentos a las niñas se les enseña acerca de las labores del hogar, el respeto a los mayores, y posiciones sexuales. Estas “clases” son impartidas por las llamadas “mujeres líderes” del campo, quienes son las encargadas de prepararlas antes del matrimonio e inculcarles que para complacer a los futuros maridos deben “practicar”.
Sin embargo, en ningún momento se les da información acerca de cómo prevenir un embarazo no deseado o enfermedades de transmisión sexual. En la mayoría de los casos ni siquiera se les habla sobre cómo usar condón y hasta se les prohíbe, relata una menor etíope.
La verdad sobre las niñas novias
La permanencia en estos campamentos es una experiencia traumática. Durante las noches las pequeñas son visitadas por los denominados “hombres hienas”, quiénes en muchos casos son contratados por las familias, para visitarlas en sus habitaciones y así iniciarlas sexualmente.
Las niñas desconocen quienes son estos hombres y no cuentan con preservativos para protegerse, por lo que tienen un alto riesgo de contraer VIH, ya que éstos por lo general tienen una amplia experiencia sexual.
A menudo son obligadas a casarse poco después de que quedan embarazadas, de ésta manera la familia se desliga de la responsabilidad de mantenerlas a ellas y sus bebés.
De acuerdo con cifras de la Organización Mundial de la Salud, 14,2 millones de niñas menores de 15 años son obligadas a contraer matrimonio cada año .
Peor aún, muchas mueren en el parto o por complicaciones relacionadas con el embarazo, la causa principal de muerte para las menores de entre 15 y 19 años de edad en los países en desarrollo, según cifras de la Organización Mundial de la Salud.
“El matrimonio infantil es una violación atroz de los derechos humanos y roba a las niñas sus posibilidades de educación, salud y perspectivas a largo plazo”, comenta Babatunde Osotimehin, Director Ejecutivo del Fondo de Población de las Naciones Unidas.
