Una seguidilla de cuestionamientos han sufrido los futuros miembros del gabinete de Michelle Bachelet, cuando resta poco más de un mes para que asuman en sus cargos. A la decisión de Claudia Peirano de no asumir en la Subsecretaría de Educación se suman los reparos hacia el nombramiento de Miguel Moreno para el mismo puesto en la cartera de Bienes Nacionales a raíz de una condena en 2011 por “ofensas al pudor”.

Dicha condena se originó luego de un altercado en octubre de ese año donde la afectada, una asistente dental, increpó a sus acompañantes en un vagón del Metro acusando haber recibido tocaciones en los glúteos. Tras el testimonio de un guardia del servicio de transportes, la justicia condenó a Miguel Moreno a cancelar 1 UTM fijada en un 10% de la multa impuesta, aunque más tarde el caso quedó sin efecto.

Sin embargo, en conversación con el diario La Cuarta, la víctima que en ese entonces presentaba un embarazo sostuvo que el vagón en el cual se trasladaba se encontraba repleto de personas, e incluso expone que no podría identificar con certeza quién la tocó.

“No sabría decir quién fue, podría haber sido cualquiera”, señaló al matutino, aclarando que tras haber advertido el hecho protagonizó una discusión con quienes la rodeaban.

Personal de Carabineros intervino en el altercado y sacó del vagón tanto a la mujer que realizó la denuncia como a Miguel Moreno, la persona con quien sostenía la discusión en el momento del arribo de los uniformados.

Pese a la condena que recibió el que fuera designado por Bachelet para la Subsecretaría de Bienes Nacionales, la afectada no evidenció certezas del incidente. “No puedo afirmar nada porque estaba de espaldas, yo supuse que era el caballero”, agregó.