A nivel mundial es conocida la controversia que genera en distintos sectores los posibles efectos que tendrían los videojuegos violentos sobre los usuarios, razón por la cual se han realizado diversas investigaciones científicas, las cuales plantean sus teorías a favor o en contra de el uso de videojuegos.
En los últimos años, diversos son los países que han decidido legislar sobre la elaboración, importación y distribución de videojuegos considerados violentos o de contenidos explícitos.
En esta materia, en Chile, desde 2007 un grupo de parlamentarios trabajan en un proyecto de ley que busca regular la comercialización o arriendo de videojuegos a menores de edad, buscando advertir cuando un título sea para “mayores de 3 años”, “mayores de 7 años”, “mayores de 12 años”, “mayores de 16 años” o “mayores de 18 años. Sólo para adultos”.
Durante esta semana se dio a conocer un nuevo avance en este proyecto, luego de que la Comisión Mixta lograra un acuerdo para que estos productos sean caratulados según recomendaciones internacionales para menores de edad, siendo sometidos al Consejo Cinemátográfico.
El senador José García Ruminot (RN), integrante de la comisión señaló que se con esta iniciativa se busca crear un parámetro para que en el caso de los videojuegos violentos, estos cuenten con una especificación en la carátula que de cuenta de su contenido y la edad que se requiere para su utilización, dependiendo de lo que dicte el Consejo de Calificación Cinematográfica.
El parlamentario agregó que los títulos comercializados por las importadoras tendrían una carátula sencilla que sea indicativa del nivel de violencia que contiene el juego, de modo que los padres sepan si comprarlo o no, dependiendo de la edad de sus hijos. El senador agregó que esto se trataría de “un aporte concreto” en la disminución de la violencia.
Lo anterior fue aprobado por unanimidad, lo que quiere decir que las carátulas de los videojuegos tendrían una advertencia sobre el contenido, que abarcaría el 25% del envase por ambos lados.
Entre las especificaciones del proyecto de ley propuesto por la Comisión Mixta destaca:
- Los fabricantes, importadores proveedores y comerciantes sólo estarán facultados para vender o arrendar los videojuegos que fueran calificados como no recomendados para menores de una determinada edad, a quienes acrediten cumplir la edad requerida, por lo que estarían obligados a exigir las cédulas de identidad de los compradores al momento de arrendar o vender los productos.
- Los fabricantes e importadores deberán disponer en los envases de los videojuegos, leyendas señalen claramente el nivel de violencia contenida en el material respectivo, de acuerdo a lo que especifique el Consejo Cinemátográfico. Advertencia que deberá ocupar, a lo menos, el 25% del espacio de ambas caras del envase o envoltorio del videojuego respectivo.
- Las multas en caso de infracción van desde 1 a 50 unidades tributarias mensuales, es decir entre $41 mil y $2 millones de pesos, además del decomiso de los títulos.
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Cabe destacar que una medida similar fue implementada en 1985 cuando la Asociación de Industria Magnetofónica de América (RIAA) comenzó a disponer en los álbumes de estudio de diversas bandas, un logotipo con la leyenda “Contenido Explícito“, en caso de producciones que presentaran un lenguaje o contenido explicito y/o ofensivo.
Esta medida fue adoptada a raíz de la presión ejercida por el Centro de Padres de Música y Recursos (PMRC), puesto que se consideraban ofendidos con el contendido de las letras y carátulas de álbumes de heavy metal. Sin embargo esta medida logró aumentar la compra de estos discos por parte de los jóvenes.
