La presencia de misteriosos círculos submarinos en el Mar Báltico, descubiertos en 2008 por un turista, ya tienen una respuesta científica que descartan las teorías de naves extraterrestres o bombas de la II Guerra Mundial. Un grupo de investigadores de las universidades de Meridional de Dinamarca y de Copenhagen pudieron dar respuesta a este fenómeno.

Los biólogos explicaron que el perímetro de los círculos está formado por “zosteras”, plantas que crecen de manera circular en aguas superficiales y dan vida así a estas extrañas figuras.

Las zosteras se caracterizan por tener tallos muy cortos y largas hojas verdes de un metro de longitud y un centímetro de ancho, consignó el sitio ABC.

“Los círculos no tienen nada que ver con bombas o con marcas de aterrizaje de naves extraterrestres, explican los biólogos Marianne Holmer y Jens Boru, y tampoco con las hadas, a quienes en la antigüedad se les atribuían fenómenos similares en tierra firme, como los famosos círculos de hadas del césped”, agregaron.

Estos círculos submarinos del Báltico tienen un diámetro de 15 metros y en su interior no existen plantas.

Pero, ¿por qué las zosteras adoptan esta forma?

Los círculos pueden ser vistos particularmente en la Isla de Mon. Las aguas de esta zona acumulan sulfuro, que al ser transportado por las corrientes se pega a las zosteras.

La sustancia retenida por estas plantas acuáticas es lo suficientemente tóxica para debilitar a las plantas más viejas o a las recién nacidas. Dado que las zosteras se extienden de forma radial, de dentro hacia fuera, resulta que los ejemplares más viejos y débiles están, precisamente, en el centro de los círculos de crecimiento.

“El resultado es una forma circular excepcional, en la que sólo las plantas de los bordes sobreviven, igual que en los círculos de hadas que se forman en el césped”, comentaron los investigadores.

Este fenómeno no sólo ocurre en el Mar Báltico. Tambien afecta la vegetación de otras aguas lo que constituye un problema grave, ya que las zosteras sirven de hábitat para cientos de otras criaturas pequeñas. El efecto provocado por el zulfuro acelera su desaparición.