El presidente boliviano, Evo Morales, ratificó que continuarán adelante con la demanda ante la Corte Internacional de Justicia de La Haya, que busca obligar a Chile a negociar una salida al mar. Esta decisión, según analistas internacionales, marca desde ya un obstáculo ante el eventual diálogo que pudiera generarse entre Bolivia y la futura administración de Michelle Bachelet.

Una hora y cuarenta y cinco minutos fue el tiempo que estuvo reunido el presidente de Bolivia, Evo Morales, con el Consejo de Reivindicación Marítima, que lo componen ex presidentes, ex cancilleres y autoridades del Estado, todo esto en el Palacio Quemado de La Paz.

La convocatoria que tuvo dos objetivos: abordar el fallo de La Haya en el diferendo marítimo entre Perú y Chile; y evaluar el futuro de la acción que ellos emprendieron el 2013 en contra nuestro país, en el mismo tribunal internacional.

Al término de la cita, Morales aseguró que todos los presentes recomendaron que el Gobierno boliviano continúe adelante con la demanda presentada en La Haya en 2013, la cual busca que se obligue a Chile a negociar una salida al mar.

Recordemos que la acción emprendida por la Dirección de Reivindicación Marítima (Diremar) de Bolivia, en términos jurídicos, apunta a los “Derechos Expectaticios”, que se traduce en el presunto incumplimiento de ofertas por parte de Chile para abordar el diferendo y entregar soluciones reales de una salida al mar para ese país.

Como elementos de prueba, señalan en La Paz, se han presentado documentos como el acuerdo de Charaña, firmado el 8 de febrero de 1975 entre los dictadores Augusto Pinochet y el boliviano Hugo Banzer.

Además, el más reciente, que fue la agenda de los 13 puntos de 2006 liderada por Michelle Bachelet y Evo Morales, donde en el ítem 6 se titula tema marítimo.

Pero esta ratificación hecha este lunes por Morales, para algunos analistas internacionales, como Miguel Navarro, pone desde ya un obstáculo en las conversaciones que pudiera haber entre el mandatario y la futura presidenta Bachelet.

En esa misma línea, el analista internacional, Guillermo Holzmann, sostuvo que Bachelet deberá buscar asesoría jurídica de forma urgente una vez que arribe a La Moneda, debido a los plazos que ya están establecidos en La Haya respecto a las pretensiones de ese país.

Las próximas fechas claves en este proceso judicial serán el 17 de abril de este año, cuando Bolivia presente la memoria de la demanda, y luego en febrero de 2015 le tocará a Chile ingresar la contra memoria.

Cabe consignar que por ahora la presidenta electa Michelle Bachelet no ha indicado si Felipe Bulnes, ex ministro y embajador en EEUU, seguirá como agente ante La Haya o si nombrará a otra persona.