A 44 personas muertas y cuatro desaparecidas subió el balance oficial por la temporada de lluvias en Bolivia, que deja más de 24.000 familias afectadas, afirmó este jueves el Viceministerio de Defensa Civil.

El gobierno dio a conocer este primer reporte oficial para poner en claro la grave situación que atraviesa el país por la inclemencia meteorológica.

Previamente, estimaciones extraoficiales cifraban en 41 personas el total de muertos por los temporales.

“En Bolivia hay 24.036 familias afectadas, 8.612 hectáreas afectadas, 713 viviendas afectadas, 44 muertos y cuatro desaparecidos”, señala el informe enviado a la AFP por el Viceministerio de Defensa Civil.

Por la magnitud del siniestro el gobierno declaró el martes emergencia en los nueve departamentos del país y dispuso de un fondo de 3,5 millones de dólares en favor del estatal Instituto de Seguro Agrario, para compensar pérdidas de unos 100.000 productores.

El poblado amazónico de Rurrenabaque, en Beni (norte), con fuerte vocación turística, ha sido el más golpeado en la última semana, pues un alud mató el sábado a 10 personas, entre ellas cuatro marineros que participaban en las tareas de rescate.

Asimismo, vecinos de pequeñas villas en ese departamento amazónico, como la de San Borja, están con el agua hasta la cintura, según imágenes fotográficas del diario privado El Deber.

En el departamento de Santa Cruz (este), las autoridades sanitarias han declarado emergencia, ante el temor de un rebrote de dengue, pues el mosquito transmisor suele aprovechar el clima húmedo y caluroso para reproducirse.

“La lluvia continúa en todo el país, en diferentes regiones, con más intensidad en el departamento de Beni, en el norte de La Paz y en el trópico de Cochabamba”, precisó el viceministro de Defensa Civil, Hernán Cabrera, en diálogo con periodistas.

El Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología pronosticó que las lluvias continuarán durante febrero.