Leyenda de la historia del tenis, Pete Sampras fue dominador de la escena durante la década del ’90, siendo incluso nombrado como mencionado por algunos como candidato a mejor jugador de todos los tiempos. Por lo mismo, es voz autorizada al momento de referirse a la actualidad de la disciplina, de la que tiene algunos reparos.

Tras arribar a Australia para asistir a los duelos finales del Grand Slam que se desarrolla en Melbourne, Sampras afirmó que “el juego sin duda ha cambiado en los últimos diez años. El tenis de saque y volea es un arte perdido. Nadie lo está haciendo realmente. Todo el mundo se está quedando atrás y enviando piedras desde allí”, según recoge Diario As.

Pistol Pete profundizó su crítica, asegurando que “ahora todo el mundo juega de la misma manera”, aunque hizo una excepción con Roger Federer, de quien dijo “tiene un poco más de variedad, para subir, cortar, hacer contragolpes, mostrar un poco de eso”.

Ante la consulta sobre qué tipo de juego desarrollaría él de retornar a la actividad en este periodo, el ex número uno del mundo cree que “haría saque y volea con los dos servicios. Esa es la única manera que sé jugar. La gente dice que es más difícil hacerlo por la tecnología de las raquetas. Pero creo que la tecnología me ayudaría”, agregando que “si usara las raquetas que Rafa (Nadal) está utilizando, es más fácil servir, más fácil rematar. Podía servir más duro, más largo. Hubiera sido más fácil”.

Por último, Sampras descartó seguir la tendencia de ex glorias del tenis como Boris Becker, Ivan Lendl o Stefan Edberg de transformarse en entrenadores. “No, no… estoy muy relajado viniendo aquí. Echo de menos el último fin de semana de un ‘major’. Echo de menos la emoción. Pero no echo de menos el estrés, ni la presión, ni las expectativas que puse en mí mismo”, concluyendo que “es un deporte duro. Siento que me marché en el momento adecuado”.