El desempleo subió en España en los últimos tres meses de 2013 y se situó en el 26,03% de la población activa, manteniéndose como el principal punto negro de una economía, que ha vuelto a la senda de un pequeño crecimiento.

España, cuarta economía de la zona euro, no ha logrado mantener la tendencia a la baja del desempleo registrado en el segundo y tercer trimestres de 2013, en un momento en que ha logrado salir de dos años de recesión, pero con un crecimiento todavía demasiado pequeño para crear empleo.

A finales de diciembre había en España 5.896.300 desempleados, o sea 8.400 menos que en el trimestre anterior, pero la población activa también bajó, hasta 22.654.500 personas, lo que explica el aumento porcentual del paro, precisó este jueves el Instituto Nacional de Estadísticas (INE).

Según la Encuesta de Población Activa (EPA) del INE, que contabiliza las personas que buscan activamente un empleo, el número de cesantes bajó en 69.000 personas en un año, lo que supone que “por primera vez desde segundo trimestre de 2007 se produce un descenso anual del paro”.

Sin embargo, en términos porcentuales, el desempleo ha vuelto a subir, ya que en el trimestre anterior se había situado en el 25,98% de la población activa, una de las más altas de los países industrializados.

Por sectores, en el último trimestre el desempleo aumentó en los servicios (+26.000), mientras que se redujo en agricultura (-39.900), construcción (-21.300) e Industria (-10.000).

Los jóvenes siguen entre los más afectados, con una tasa de desempleo del 55,06% en la franja de edad de entre 16 y 24 años, en alza respecto a los tres meses anteriores.

También se ha registrado un aumento de 24.600 hogares en que todos sus miembros activos están desempleados, elevando su cifra total hasta 1.832.300 millones.

La crisis social sigue siendo pues profunda en un momento en que el país, doblemente golpeado en 2008 por el estallido de la burbuja inmobiliaria y el comienzo de la crisis financiera internacional, acaba de registrar un pequeño crecimiento saliendo de una recesión de dos años.

En el tercer trimestre de 2013, España registró un crecimiento del 0,1%, saliendo así de su segunda recesión en cinco años, y su economía debería crecer un 0,3% en el cuarto trimestre, según las previsiones del gobierno conservador.

Estas cifras son, sin embargo, insuficientes para estimular la creación de empleo, según el conjunto de los analistas.

El gobierno esperaba a finales de 2013 una tasa de paro del 26,6%, y del 25,9% a finales de 2014, y, según el FMI, España necesitará otros cinco años para volver a tener una tasa de desempleo inferior al 25%.