Durante 60 días permanecerá en prisión preventiva la mujer Tamara Farías Vergara, imputada por disparar al guardia de un banco en la comuna de Estación Central. Desde el Ministerio Público señalaron que no es posible confirmar la hipótesis de una venganza por la muerte de Sebastián Oversluij, abatido el mes de diciembre.

Por el delito de robo calificado fue formalizada Tamara Farías Vergara, la joven de 22 años imputada de disparar en al menos 4 ocasiones en contra de un guardia de una sucursal bancaria en Estación Central, quedando en prisión preventiva por los 60 días que durará la investigación.

Imputada conocida en el entorno de Villa Francia, por ser sobrina de los hermanos Rafael y Eduardo Vergara Toledo, asesinados por Carabieneros en 1986.

La mujer, según la fiscalía, habría preparado este delito, pues previo a los hechos ingresó al menos en una ocasión al banco, y le pidió a su victima Ronaldo Vargas que cuidara su bicicleta, volviendo minutos después, y pidiendo al mismo guardia ayuda en un trámite, momento en que le disparó.

Tras esto, huyó deajando en el piso el revólver usado, y robando el arma del guardia. Diez minutos después, se presentó ante la 58º comisaría, señalando que venía a formalizar una denuncia por el robo de una bicicleta, lugar donde fue detenida al coincidir su descripción con el de la autora de los hechos.

Preliminarmente se señaló el hecho como una represalia por la muerte de Sebastián Oversluij, abatido el pasado 13 de diciembre en una sucursal del mismo banco en Pudahuel, antecedente que según el mayor de Carabineros Alejandro Casanovno, no ha sido confirmado.

En tanto, el fiscal Álvaro Núñez evitó referirse sobre la teoría de la represalia, que se basaría en una supuesta relación sentimental que habría tenido la imputada con Sebastián Oversluijeste.

Durante la formalización, cercanos a Tamara Farías protagonizaron un altercado con Gendarmería, luego que el tribunal sólo autorizara el ingreso de dos familiares.

El abogado defensor de la imputada, Rodrigo Román, aseguró que no hay claridad en torno a la participación de la mujer en el delito, ya que las imágenes de las cámaras no son claras.