El analista internacional, José Rodríguez Elizondo, afirmó que desde el año 1986 el Gobierno chileno conocía las intenciones marítimas del Perú.

Según relata, fue el embajador peruano Juan Miguel Bákula quien entregó una nota al canciller chileno de la época, Jaime del Valle, en la cual manifestó la necesidad de suscribir una delimitación formal y definitiva de los espacios marítimos. La respuesta chilena fue que este tema será objeto de estudio.

“A mi lo que más me extraña es que nadie quiere acordarse que en el Gobierno de (Augusto) Pinochet está el origen, y se están diputando responsabilidades políticas entre los Gobiernos de la Concertación y de Sebastián Piñera. Pero a nadie se le ocurre pensar que esto se inicia en 1985 y que hubo secreto en la transmisión del mando, porque Pinochet nunca le comentó a (Patricio) Aylwin lo que había pasado (…) Fue un ocultamiento dentro del Estado”, afirmó el académico.