Dos personas fallecieron ahogadas en la costa de Curicó durante este domingo.

El primero de los casos se produjo en Iloca, frente a la ex cancha de aterrizaje, donde un joven de 19 años que había viajado a la playa sólo por el día en compañía de su abuela y una hermana menor, se ahogó mientras se bañaba.

Se trata de Gerardo Alexis Urrutia Herrera, quien a eso de las 11 de la mañana del domingo ingresó al mar lanzándose un “piquero” en presencia de sus familiares. Aparentemente, habría sufrido un calambre, por lo que se hundió y fue llevado por la corriente.

Dada la alerta, de inmediato una patrulla de la Armada con asiento en Constitución, bomberos y el GOPE de Carabineros iniciaron un plan de búsqueda del joven desaparecido, trabajo que fructificó siete horas después cuando unos bañistas localizaron el cuerpo flotando en la orilla, a unos dos kilómetros al norte del sector donde había desaparecido.

Gerardo Alexis Urrutia, con domicilio en Villa O´Higgins de la localidad de Lontué, entraría a estudiar ingeniería civil en la Universidad de Talca, campus Los Niches.

En medio de las labores de rescate, algunos turistas criticaron la falta de señalética que advierta que Iloca es una playa no apta para el baño, a lo que la autoridad se defiende, señalando que los letreros se los roban o los queman.

La segunda víctima fatal por inmersión del fin de semana en el sector costero de Curicó, corresponde a un hombre con residencia en la región de O´Higgins que llegó a acampar con su familia al oriente del Puente Paula, en la comuna de Hualañé.

Manuel Flores Toro de 40 años, procedente de la localidad de Pichidegua, se lanzó a las aguas del Río Mataquito, sin que pudiera salir a la superficie. Más tarde su cadáver fue rescatado por bomberos.

Los cuerpos de ambas víctimas de asfixia por inmersión en la zona fueron enviados al Servicio Médico Legal de Curicó.