Distintos dirigentes empresariales manifestaron que las consecuencias del paro de los trabajadores portuarios están comenzando a afectar la imagen de Chile en el exterior. La huelga cumple ya 16 días.

Aumentan las críticas desde el sector empresarial a la movilización de los trabajadores de los puertos del país, quienes exigen mejoras laborales, principalmente el pago retroactivo de la media hora de colación que se les adeuda desde 2006. Piden que el Estado se haga cargo de la cancelación.

Tras reuniones protocolares con el presidente de la Corte Suprema, Sergio Muñoz, el presidente de la Cámara de la Producción y el Comercio, Andrés Santa Cruz, y el presidente de la Cámara Nacional del Comercio, Ricardo Mewes, afirmaron que el paro -a su juicio- se ha extendido más allá de lo razonable.

Santa Cruz desestimó la convocatoria que ha logrado la movilización y pidió que el gobierno haga respetar el Estado de derecho. Afirmó que en Mejillones “cuatro de los cinco sindicatos estaban trabajando, y de ese quinto sindicato que estaba en la huelga más de la mayoría ha regresado a sus labores, por lo tanto se descolgaron y dejó de haber una huelga legal”.

Por su parte, Ricardo Mewes advirtió que el daño en las exportaciones va a ir aumentando por cada día que se extienda este paro, lo que afecta la imagen de nuestros país en el exterior. “Chile se ha caracterizado por cumplir sus compromisos y del punto de vista de las exportaciones ya tenemos problemas. En el caso de las importaciones, quien está importando insumos para procesos productivos no puede llegar a quien le fabrica y ese es el daño más grave”, explicó.

Los dirigentes empresariales no quisieron referirse a la validez de las demandas de los trabajadores, limitándose a señalar que deberán ser analizadas en su mérito y recalcando que eso ‘no les da derecho a afectar a todos los chilenos’.