El titular del organismo antidrogas de Argentina (Sedronar), el cura Juan Carlos Molina, denunció el jueves hechos de corrupción en la anterior gestión que incluyen el manejo discrecional e irregular de fondos públicos.

“Directores de áreas designados en forma anómala realizaban contrataciones irregulares por 800.000 pesos (unos 119.000 dólares), entre los que destacan facturas por gastos de 90.000 pesos en almuerzos”, reveló el sacerdote, nombrado en noviembre pasado.

La Secretaría de Programación para la Prevención de la Drogadicción y la Lucha contra el Narcotráfico (Sedronar) es el organismo que se dedica a la prevención de adicciones y el tratamiento de drogadictos.

Molina es un hombre de confianza de la presidenta Cristina Kirchner, que se desempeña además como asesor ad honorem de la ministra de Desarrollo Social, Alicia Kirchner, cuñada de la mandataria.

“Si existen anormalidades, deberán someterse a las leyes”, dijo el jefe de Gabinete Jorge Capitanich, al ser consultado por las denuncias.

El nombramiento del religioso se produjo después de que la Iglesia argentina divulgara en un documento su preocupación por el crecimiento del narcotráfico y la drogadicción en el país.

Argentina está en segundo lugar en número de consumidores de cocaína en Latinoamérica (600.000), después de Brasil, de acuerdo a un informe de 2012 sobre Control Internacional de Narcóticos, basado en la agencia antidrogas estadounidense DEA.