La crisis en Renovación Nacional podría judicializarse tras la decisión de la Comisión Política de la colectividad, la cual mandató elaborar un informe en derecho que resuelva si los cupos parlamentarios de Karla Rubilar, Joaquín Godoy y Pedro Browne pertenecen a RN, ya que su renuncia al partido se produjo antes de haber sido oficialmente proclamados como diputados electos por el Servel.

Frente a esta posibilidad, el diputado Joaquín Godoy apuntó directamente contra el presidente de RN, Carlos Larraín, quien dio a conocer esta arremetida judicial contra los diputados Godoy, Rubilar y Browne.

El actual segundo vicepresidente de la Cámara le recordó a Larraín que si de legitimidad se trata, él fue designado senador por Valdivia sin ningún voto y sólo por el hecho de ser presidente de su partido.

Al respecto, el senador y vicepresidente de Renovación Nacional, Francisco Chahuán, buscando poner paños fríos a esta nueva polémica, invitó a todas las partes a bajar el tono del debate y le quitó piso a la posibilidad de iniciar acciones legales para impugnar los escaños parlamentarios de los tres diputados que renunciaron a ese partido.

Por su parte, la Bancada de Diputados de Renovación Nacional solicitó formalmente que Cristián Monckeberg encabece una mesa de consenso del partido, con miras a las elecciones de la colectividad que se desarrollarán en mayo próximo.

Monckeberg valoró la disposición expresada por sus colegas parlamentarios y reconoció que el momento que atraviesa Renovación Nacional no es fácil.

Por otra parte, el diputado Nicolás Monckeberg profundizó en sus críticas a la actual mesa directiva, acusando que las críticas autodestructivas de algunos timoneles han generado la desafección de muchos militantes.

En esa línea, se mostró dispuesto a que el movimiento Amplitud, encabezado por los diputados que renunciaron a RN, se sume como un tercer partido a la Alianza.

Esto porque afirmó que “es mejor tener tres partidos con espíritu de coalición que tener uno donde todos se acuchillan. Y la verdad es que al tener un partido donde todo es desconfianza, todo es pelea, finalmente no se construye lo que la gente pide, y no tengo miedo a que la centro derecha tenga nuevos partidos. Lo único importante es que esos nuevos partidos actúen de forma unida”.

En tanto, la diputada Marcela Sabat se sumó a las criticas, expresando que los responsables del complejo momento que atraviesa Renovación Nacional son el senador Carlos Larraín y su mesa directiva.

Ante esto, Sabat indicó que le parece que una mesa encabezada por Cristián Monckeberg podría ser la salida a la crisis, mientras otros parlamentarios del sector expresaron opiniones similares.

Éste es el escenario en el que se desarrollará el próximo sábado el Consejo General de Renovación Nacional en Santiago, instancia partidaria no resolutiva que junto con evaluar los resultados de la última elección parlamentaria y presidencial, será la oportunidad para analizar cómo salir de la aguda crisis que enfrenta la colectividad.