La primera ejecución del año en Estados Unidos tuvo lugar el martes en Florida (sureste), en momentos en que la aplicación de la pena capital mostró un neto retroceso en 2013 en este país.

Askari Abdula Muhammad, conocido anteriormente como Thomas Knight, fue ejecutado mediante inyección letal por tres homicidios, luego de pasar 4 décadas en el corredor de la muerte marcadas por múltiples apelaciones, informaron las autoridades penitenciarias de Florida.

Este estadounidense de 62 años fue declarado muerto a las 20:45 (hora de Chile), dijo a la AFP, Misty Cash, portavoz de las prisiones de Florida.

En un primer momento fue condenado a muerte en 1974 por el asesinato de su patrón y la esposa de éste, a quien había secuestrado para extorsionarlo. Luego recibió una segunda condena a la pena capital en 1983 por haber asesinado a un guardia de la prisión, un homicidio que cometió con una cuchara.

Su pena de muerte, aplazada varias veces por vicios de procedimiento, fue finalmente confirmada en septiembre de 2013.

Esta fue la primera ejecución del año en Estados Unidos, en un Estado que aceleró el ritmo de sus aplicaciones de la pena capital, pese a la inquietud generada por el empleo de un nuevo cóctel de barbitúricos en sus inyecciones mortales.

A nivel de todo el país, el número de ejecuciones y de condenas a muerte declinó netamente en 2013, para llegar a uno de sus niveles más bajos en décadas, según el informe anual del Centro de Información sobre la pena de muerte.

En 2013, 39 condenados fueron ejecutados en Estados Unidos, contra 43 en 2012. Desde 1999, año récord con 98 ejecuciones, esa cifra decreció un 60% en todo el país, donde 3.108 detenidos se encontraban en los corredores de la muerte al 1 de abril de 2013, contra 3.170 el año anterior.