El alemán Michael Schumacher continúa en coma tras el accidente de esquí que sufrió el domingo, una desgracia que podría haber sido grabada por la cámara que el ex piloto llevaba en el casco.

La familia del siete veces campeón de la Fórmula 1 decidió entregar de inmediato la cámara a la gendarmería francesa, aseguró la manager del ídolo de Ferrari, Sabine Kehm.

“No es cierto que eso haya sucedido en contra del deseo de la familia”, enfatizó Kehm.

Schumacher, de 45 años, fue operado ya dos veces del cráneo para quitarle coágulos formados tras el impacto de su cabeza contra una piedra en la estación francesa de Méribel. El alemán permanece en coma inducido.

Kehm envió un comunicado a los medios en el que señaló que “cualquier información sobre el estado de salud” de Schumacher que no provenga “de los médicos que lo tratan o de su management no es válida”, sino “pura especulación”.

Además, el comunicado agrega que no se espera una rueda de prensa hasta el lunes.

Por otra parte, los familiares y amigos de Schumacher agradecieron la gran cantidad de mensajes de apoyo y buenos deseos que recibieron el viernes, día en el que el ex piloto cumplió años.

“La increíble cantidad de fans de Ferrari ante la clínica directamente nos superó y llevó hasta las lágrimas”, dijo a dpa el artista visual Oliver Bienkowski.