En la reunión sostenida por los representantes del pacto Nueva Mayoría, para definir a los presidentes de las distintas comisiones y de la Cámara de Diputados, los jefes de las bancadas de la Democracia Cristiana y del Partido Comunista tomaron una pausa para expresar su disposición mutua de seguir trabajando en conjunto en la arena política.

El diputado de la DC Ricardo Rincón expresó estar en contra de la definición del presidente de su partido, Ignacio Walker, quien calificó al trabajo DC-PC como “un acuerdo electoral que no alcanza a ser una coalición política”.

“Entonces tendremos una diferencia con el presidente del partido, así de sencillo. Venimos diciendo hace mucho tiempo que no tenemos ningún problema en nuestro trabajo conjunto con el Partido Comunista y así va a hacer. Por lo demás, es la presidenta Michelle Bachelet quien seleccione sus equipos dentro de esta coalición, donde también estamos nosotros y el Partido Comunista”, manifestó el parlamentario.

“Ese pacto electoral aspira a ser coalición, aspiraba antes y con más razón ahora que ya ganamos las elecciones”, añadió.

El jefe de la bancada comunista, Lautaro Carmona, fue más cauto con su interés por conformar una coalición, aunque señaló que “hay una convergencia política que tiene que ver con el programa, que ya fue votado y aprobado. Ahora es el momento de llevarlo a cabo, ese es el punto de calidad. Creo que generar una semántica con una diferencia que está saldada en el proceso real, no es contribuyente”.

“El Partido Comunista no fue parte de la Concertación, ni ha planteado ingresar a una coalición, no nos toca a nosotros. Estamos compartiendo en un espacio que es distinto que se llama Nueva Mayoría (…) la Nueva Mayoría es una convergencia política. No puedes remitir un acuerdo electoral con las tareas de hoy, cuando ya pasaron las elecciones. Sin embargo, tenemos un programa, no hallo algo más político que un programa”, agregó el también secretario general del PC.