Un puma café oscuro, de más de 70 kilos de peso y 2 metros de largo, tiene atemorizado a un parcelero del sector Vega Blanca, en Tomeco, comuna de Yumbel. El animal devoró 12 de sus ovejas, con las cuales había iniciado un negocio de crianza.
Para Pablo Figueroa, 60 años, funcionario de Indap en Concepción, la crianza de ovejas Safor se transformó en una aventura salvaje. Tenía 22, incluyendo al carnero, pero el puma dio muerte ya a 12, sumando al fornido macho reproductor.
El último ataque ocurrió la madrugada del domingo recién pasado, cuando el felino devoró nada menos que cinco ovejas.
Figueroa está absolutamente convencido que el ganado fue atacado por un puma, de eso no tiene dudas, y añadió que no ha sido el único afectado, aunque otros parceleros no denuncian al SAG, por estimarlo tiempo perdido.
Este martes, un funcionario del SAG Los Ángeles llegó hasta el terreno, tomó muestras de fecas del presunto puma, recogió datos y los enviará a Santiago donde decidirán los siguientes pasos.
Pablo ahora se mueve con una escopeta en las manos, porque el puma es muy fuerte, ya que al carnero, por ejemplo, de unos 80 kilos, lo mismo que a una hembra preñada, los arrastró cerro arriba unos 350 metros entre bosques. Cuando lo vio, calculó sus medidas, comenzando por el alto.
Avisó al SAG porque espera que el puma sea cazado vivo y alejado de la zona, no matarlo, y seguir con su abortado negocio que por ahora registra pérdidas cercanas a un millón de pesos.
Restos de animal atacado | Pedro Cid (RBB)
Pedro Cid (RBB)
Pedro Cid (RBB)
