Ya sea que lo celebres hoy o a fines de enero como los chinos, el Año Nuevo es en todas las culturas una instancia de alegría y celebración, pero también un momento para reflexionar sobre lo que logramos en el periodo que se va y lo que queremos para el que se avecina.

Se trata de un momento único, ya que si bien pocas cosas son diferentes entre el 31 de diciembre y el 1 de enero, nuestra psicología lo interpreta como un nuevo comienzo. Una nueva oportunidad para tomar resoluciones o establecernos metas.

Y como no todos los ámbitos son igual de importantes, en BioBioChile te proponemos un breve cuestionario de 7 preguntas, que te ayudarán a saber cuán satisfecho estás con tu propio desarrollo y qué aspectos deberás atender con más ahínco este 2014.

Nº1: ¿Logré las metas que me propuse este 2013?

Haz un recuento mental del año. ¿Cuáles fueron tus hitos más importantes? ¿Eran los que esperabas cuando inició? ¿Atendiste las oportunidades que se te abrieron en el camino? Para este nuevo año, trata no sólo de fijar 3 metas principales que quieras alcanzar, sino también una metodología para alcanzarlas. Ya sea bajar de peso o conseguir una beca de estudios en el extranjero, recuerda que ningún objetivo llega por sí solo. Debes planificar según tus posibilidades y ser disciplinado en trabajar por alcanzarlas.

Nº2: ¿Estoy contento con mi relación de pareja (o la falta de ella)?

No importa si estás casado, pololeas, tienes amores ocasionales o prefieres estar solo. Lo importante es que seas feliz con la opción que hayas tomado. El nuevo año es una oportunidad única para hacer un examen en pareja de las cosas que han ido bien y las que necesitan mejorar. En algunos casos -los más serios- también puede ser la oportunidad de acabar con relaciones tóxicas que te hacen daño.

Y si te sientes solo, ten presente que pocas veces las relaciones de pareja simplemente llaman a la puerta. En realidad son una mezcla de estar atento a las personas que podrían llegar a ser importantes en tu vida y actuar (o responder) cuando sea el momento.

Nº3: ¿Me siento a gusto y valorado en mi trabajo?

Pocas cosas son peores que terminar un domingo odiando que al día siguiente sea lunes. Si tienes esta sensación, es probable que no tengas un trabajo que te satisfaga ni menos te apasione. Quizá seas víctima de compañeros de labores o jefes que no te valoran o, en el peor de los casos, que ejercen algún tipo de maltrato hacia ti. Considera este inicio de año como una oportunidad para dejar atrás esas malas experiencias. Resuelve los problemas internos en la oficina (habla con las personas con quienes tienes conflicto o pide de una vez ese aumento de sueldo).

Si la situación no tiene vuelta, estás en el mejor momento para comenzar a buscar otros horizontes. No dejes que tu actual trabajo te encasille.

Nº4: Este 2014… ¿necesito ganar más dinero o reducir mis gastos?

Y hablando de temas laborales, quizá tu presupuesto también requiera una revisión. Las finanzas mal llevadas son una de las mayores fuentes de estrés tanto personales como familiares, y en muchos casos se puede liberar presión con un poco de orden. ¿Hay elementos que te puedan ayudar a reducir tus gastos? Quizá tengas servicios contratados que realmente no necesites, o estés gastando mucho en compras innecesarias. Haz un registro mensual de tus pagos y descubre dónde están las filtraciones.

Si requieres ganar más dinero, tienes 3 opciones: pedir un aumento de sueldo, cambiarte de empleo o conseguir un trabajo que lo complemente. Una gran idea es aprovechar los temas que te apasionan para mejorar tus ingresos. Por ejemplo, tomar fotografías o realizar ventas por catálogo.

Nº5: ¿Hay algún familiar o amigo con quien deba resolver temas pendientes?

En ocasiones, un malentendido o un conflicto que escaló hasta salirse de control puede romper nuestra relación con un familiar o un amigo cercano. Si sueles pensar en esa falta, quizá sea hora de darle una oportunidad a la reconciliación con el nuevo año. Una llamada por teléfono o un mensaje puede ser el primer paso. Puede que ambos descubran que en realidad era mayor el rencor -acrecentado con el tiempo- que la diferencia que los distanció originalmente.

Nº6: ¿Hubo algo en mi salud a lo que deba prestar atención este 2014?

La mayoría de nosotros no suele prestar atención a nuestro cuerpo hasta que sucede algo grave, como una lesión o una enfermedad. ¿Has perdido estado físico este 2013? ¿Notaste alguna dolencia o marca en tu piel que te haya preocupado? No es bueno quedarse con la duda. Pide una hora al médico o toma la resolución de comenzar a hacer ejercicio. Si te pones de acuerdo con un amigo, será más fácil llevarlo a cabo.

Nº7: ¿Cuál será mi sueño este 2014?

Si tuvieras que elegir un sueño para este 2014… ¿cuál sería? ¿Hacia dónde quieres que marche tu vida? Piensa en grande. Quizá sea algo que requiera más de un año para lograrlo, pero definitivamente, este puede ser el año en que des el primer paso.