Entre las cosas que investigaron los científicos este año, también estuvo el sexo, porque claro, es parte fundamental de la vida.

Conoce algunos de los principales hallazgos de 2013 en torno al tema, recopilados por LiveScience y BioBioChile.

1. El sexo alivia el dolor de cabeza

Un estudio publicado en marzo en la revista Cephalalgia señaló que cerca de un tercio de quienes padecen migraña ven aliviadas sus molestias con una sesión de sexo.

Aunque no está del todo clara la razón, se cree que las endorfinas liberadas por el cerebro durante las relaciones sexuales pueden tener un efecto calmante.

2. El sexo no quema tantas calorías como la mayoría piensa

Así lo determinó un grupo de especialistas detrás del libro “Orgasmo. Todo lo que siempre quiso saber y nunca se atrevió a preguntar”, compuesto por el neurocientífico Barry Komisaruk, la divulgadora e investigadora sexual Beverly Whipple, la experta en sexualidad de la BBC Sara Nasserzadeh y el sexólogo Carlos Beyer-Flores.

Los profesionales afirmaron que los orgasmos son beneficiosos para nuestra salud, aunque derribaron el mito de que sean “particularmente efectivos” para quemar calorías.

Al respecto, señalaron que por sí mismo un orgasmo quema apenas entre dos y tres calorías por minuto, muchas menos de lo que creen las personas. Es decir, es mejor que un paseo, pero no tan bueno como trotar.

3. La mayoría de las mujeres no llega al orgasmo durante el sexo casual

Un estudio realizado por Brown University señaló que el sexo casual suele ser decepcionante para la mayoría de las mujeres, porque generalmente no las lleva al orgasmo. Esto puede deberse a que la pareja de turno no conoce las cosas que le gustan a la mujer ni se preocupa de sus necesidades, como sí lo hace un compañero estable.

4. Los principales remordimientos sexuales de hombres y mujeres son muy distintos

Un estudio realizado en conjunto por las universidades estadounidenses de Texas y California, determinó que hombres y mujeres tienen remordimientos sexuales muy distintos.

Según el reporte los tres pesares más comunes de los hombres en el plano sexual son: No acercarse a una posible pareja porque ser demasiado tímido; no haber sido más aventureros sexualmente en su juventud; y no haber sido más aventureros sexualmente cuando eran solteros.

En cambio, para las mujeres son: Haber perdido la virginidad con la pareja equivocada; engañar a su pareja actual o a una del pasado; y haber tenido relaciones sexuales demasiado pronto con una pareja.

5. Adeptos al sexo sadomasoquista pueden ser más sanos psicológicamente

Aunque el nuevo Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales (DSM V) incluye las preferencias sexuales sadomasoquistas como un potencial problema, un estudio sugirió que las personas asiduas a estas prácticas podrían ser incluso más sanas psicológicamente que aquellas que llevan una vida sexual más tradicional.

La investigación dirigida por el psicólogo Andreas Wismeijer, académico de la Nyenrode Business University (Países Bajos), y publicada en Journal of Sexual Medicine, concluyó que los adeptos al BDSM obtuvieron mejores resultados en una variedad de pruebas de personalidad y psicológicas, que las personas que no suelen participar en actos sexuales “inusuales”.

Los resultados muestran que en un nivel básico, los practicantes de BDSM no parecen ser muy distintos que la población en general. Sin embargo, al ahondar un poco más, se determinó que son más extrovertidos, más abiertos a nuevas experiencias, más conscientes y menos neuróticos (rasgo clave para determinar una personalidad ansiosa) que quienes llevan una vida sexual corriente. Los aficionados al sadomasoquismo también obtuvieron mejores calificaciones en ítemes como la sensibilidad al rechazo y la paranoia.

6. El sexo prolonga la vida

Una investigación desarrollada por profesionales de la Universidad de Michigan (Estados Unidos) demostró que el sexo tiene un efecto en la salud global y longevidad, mejorando la calidad y la esperanza de vida.

El estudio fue desarrollado en moscas del vinagre, animal usualmente utilizado para realizar indagaciones sobre envejecimiento, y demostró que la frustración sexual tendría un rol fundamental en la salud y el envejecimiento.

La indagación develó que las moscas macho que percibieron las feromonas sexuales de sus parejas, pero que no tuvieron oportunidad de aparearse sufrieron un estrés biológico que les condujo a tener una vida más corta; lo contrario ocurrió con los especímenes que lograron hacerlo.

7. El sexo por las mañanas mejora los resfríos

Según una investigación británica, tener relaciones sexuales por las mañanas mejora las vías respiratorias y es mucho más eficaz que tomarse una pastilla para el resfrío.

La Universidad de Belfast en Irlanda, realizó una investigación, la cual afirma que “tener dosis diarias de sexo sirve para mejorar las enfermedades del invierno”.

8. Condones podrían aumentar bacterias beneficiosas en la vagina

Un estudio de investigadores del Beijing Friendship Hospital determinaron que además de prevenir embarazos no deseados y evitar el contagio de enfermedades de transmisión sexual, el condón también puede ayudar a que bacterias beneficiosas se desarrollen en la vagina.

Los científicos señalaron que el condón puede ayudar a la vagina a proteger sus ácidos naturales, pues durante la actividad sexual se puede alterar el equilibrio del ecosistema de la zona íntima femenina, porque el semen tiene un pH más elevado (de 7,0 a 8,0).

9. ¿La adicción al sexo no es una enfermedad?

La hipersexualidad o adicción al sexo se caracteriza por un impulso sexual irrefrenable, pensamientos persistentes y conductas sexuales que acarrean una serie de problemas para la vida cotidiana de una persona.

Sin embargo, investigadores de UCLA publicaron en la revista Socioaffective Neuroscience and Psychology un estudio que asegura que la adicción al sexo no sería una enfermedad. Para ello se midió el comportamiento cerebral de 52 voluntarios que tendrían problemas con la visualización de imágenes sexuales.

10. El sexo puede hacerte ver hasta 7 años más joven

Una investigación de David Weeks, ex jefe de psicología de la vejez en el Royal Edinburgh Hospital (Reino Unido), muestra que los hombres y mujeres de edad avanzada que llevan una vida sexual activa lucen entre 5 y 7 años más jóvenes que su edad real.

Esto se complementa con otra investigación británica que acredita que tener sexo regularmente reduce a la mitad las probabilidades de morir tempranamente.