Las directivas de la Central Unitaria de Trabajadores -CUT- y la Confederación de la Producción y el Comercio -CPC- podrían presentar a las futuras autoridades un documento con propuestas en materia laboral.
Al menos cinco reuniones han sostenido, desde la firma del Acuerdo de Voluntades a inicios de 2012, técnicos de la CPC y de la Fundación Instituto de Asuntos Laborales de la multisindical.
En los encuentros se han abordado los puntos de confluencia y divergencia que tienen los trabajadores con el gran empresariado, en materia de eventuales reformas laborales.
En este acercamiento fue clave, primero, la llegada de la nueva directiva de la Confederación de la Producción y el Comercio, encabezada por su presidente Andrés Santa Cruz, y, segundo, el arribo de Bárbara Figueroa a la CUT.
Santa Cruz indicó que el diálogo con la Central es muy importante para los empresarios.
El Acuerdo de Voluntades, firmado en 2012 incluye avances en materia de protección del empleo, seguridad laboral, subsidio a la contratación del primer empleo, negociación colectiva y sindicalización, multirut y salario mínimo.
Nolberto Díaz, vicepresidente de la multisindical, sostuvo que este documento firmado por ambas agrupaciones no impide que la Central exija reformas en las que no existe consenso.
Díaz adelantó que antes de marzo se debería producir un último encuentro entre las directivas de la CPC y la CUT, para sellar o renovar el Acuerdo de Voluntades.
De todas formas, ambos gremios presentarán a las futuras autoridades sus propuestas. Mientras la CPC pondrá el énfasis en la eventual reforma tributaria, la CUT apostará por modificar el Código Laboral.
