El director del Instituto Nacional de Estadísticas, Juan Eduardo Coeymans, dio a conocer este lunes las conclusiones de la entidad respecto al Censo 2012, tras analizar los informes entregados por distintas comisiones nacionales e internacionales al respecto.

La autoridad afirmó que el organismo estatal considera que el Censo cumple con los estándares internacionales y que la base de datos cuenta con niveles de calidad internacionalmente aceptados, por lo que la información contenida es útil para el diseño de políticas públicas.

La entidad aseguró que realizar un nuevo censo tomaría 4 años de planificación y preparación, por lo que recomiendan ejecutar una nueva medición en 2020, pero descartó que sea conveniente llevar a cabo un censo abreviado en 2015.

La fecha elegida además sería porque Naciones Unidas aconseja realizar censos de población y vivienda en años terminados en cero, por lo que el país se alinearía con el resto del mundo.

Por otra parte, sostuvo que proponen realizar actualizaciones de conteos de población cada cinco años, antes de hacer el proceso completo en 2020.

Sobre ello, agregó que bajo el supuesto de que se realizara en 2020 un nuevo censo, el primer conteo de población se llevaría a cabo en 2016, y el siguiente en 2025.

En cuanto a los datos del Censo 2012, reveló que los resultados serían dados a conocer a la opinión pública a fines de febrero de 2014. No obstante, la cifra de la población final de nuestro país debe ser estudiada por medio de “conciliación demográfica”, que considera igualmente otros datos de encuestas nacionales e internacionales, por lo que este número oficial sería entregado alrededor de septiembre del próximo año.

Los datos los planean analizar por medio de distintos cuadros, entre los que se incluiría la proyección de los moradores ausentes que no fueron encuestados, y otro que considere sólo a la gente que lo realizó efectivamente, para lo cual se creará el Departamento de Censo y estudios de población en enero del próximo año.