El presidente francés, François Hollande, provocó un incidente diplomático con Argelia, al declarar bromeando que “ya era bastante” que el ministro del Interior francés hubiera regresado “sano y salvo” de una visita a este país norteafricano.

La declaración que creó la polémica data del 16 de diciembre, cuando, bromeando, el mandatario dijo ante el Consejo Representativo de Instituciones Judías de Francia (CRIF) que el ministro Manuel Valls había regresado “sano y salvo” de Argelia, agregando: “Ya es bastante”.

Comentando esta declaración que inicialmente pasó desapercibida, el gobierno argelino la calificó el sábado de “incidente lamentable”.

“Habíamos terminado el año 2012 con el éxito de la relevante visita de François Hollande a Argelia (…) Queremos poder encontrar en los días que nos separan de fin de año, un modo de dar vuelta la página de este incidente lamentable”, declaró el ministro de Relaciones Exteriores argelino Ramtane Lamamra.

El domingo, la presidencia francesa calificó de “polémica sin fundamento” las críticas a lo declarado por Hollande, quien “lamenta sinceramente la interpretación” de sus declaraciones.

El mandatario francés anunció que se comunicaría directamente con su homólogo argelino Abdelaziz Buteflika.

“Todo el mundo conoce los sentimientos de amistad que François Hollande tiene por Argelia, y el gran respeto que le inspira su pueblo, como lo probó la visita de Estado que realizó en diciembre pasado y los discursos que pronunció”, indicó la presidencia en un comunicado.

El jefe de la diplomacia argelina expresó su “satisfacción” por el comunicado del presidente francés, según su portavoz, Amar Belani.

“El estado y las perspectivas de la asociación excepcional entre Argelia y Francia serán el tema de la comunicación telefónica que el presidente de la república, Abdelaziz Buteflika, recibirá de su homólogo francés”, añadió el portavoz.

En diciembre de 2012, Hollande había reconocido en Argelia, un país independiente de Francia desde 1962, que la colonización francesa acarreó “sufrimientos” a los argelinos. Entre estos “sufrimientos”, citó matanzas como la del 8 de mayo de 1945 en Setif, concomitante a la capitulación de la Alemania nazi que había ocupado gran parte de Europa.