La construcción del estadio de Manaos para el Mundial Brasil-2014, donde el sábado un obrero murió en un accidente, sólo podrá continuar durante el día, descartando cualquier tipo de trabajo en horario nocturno, informó la Fiscalía del Trabajo.

A ese acuerdo llegaron el ente fiscalizador del estado de Amazonas y la firma Andrade Gutiérrez, responsable de la construcción del Arena Amazonia, además de anunciar la reanudación total de los trabajos en ese escenario.

Aunque las obras se habían reiniciado parcialmente el lunes, los trabajos de construcción en las zonas altas, como los techos, se encontraban suspendidos durante la investigación del accidente que le costó la vida a Marcleudo de Melo Ferreria, de 22 años, quien cayó al vacío desde 35 metros después de que su cable de protección se rompiera.

Se trata de la segunda víctima mortal en las obras de ese estadio, después de que otro hombre muriera en mayo.

Otros tres trabajadores han fallecido en obras de los estadios mundialistas: dos en noviembre en Sao Paulo y otro en Brasilia el año pasado.

La muerte de De Melo el sábado volvió a poner en el tapete las preocupaciones sobre la seguridad y los plazos para las obras, a sólo seis meses de la Copa del Mundo.

Estaba previsto que el estadio, que tendrá una capacidad para 42.000 personas, sería entregado la segunda quincena de enero para una primera prueba.

El Arena Amazonia, uno de los seis de los doce estadios mundialistas que continúan en construcción, acogerá los partidos Inglaterra-Italia (14 de junio, Grupo D), Camerún-Croacia (18 de junio, Grupo A), Estados Unidos-Portugal (22 de junio, Grupo G) y Honduras-Suiza (25 de junio, Grupo E), todos de la primera fase.