Con motivo de que se acercan las fiestas de Navidad y Año Nuevo, el académico de la Facultad de Enfermería de la Universidad Andrés Bello, Gabriel Rodríguez, recomendó para esas fechas “controlar las emociones, intentar preparar los alimentos en el hogar, principalmente basándose en verduras frescas y frutas; beber moderadamente y no conducir si lo ingiere.

También aconsejó tomar abundante agua, sobre todo en los niños y diabéticos; proteger el presupuesto económico y buscar ayuda profesional en caso de tener malestares o síntomas relacionados a alguna trasgresión.

“Para muchas personas estas fiestas sirven para reforzar los lazos familiares y vínculos afectivos, pero pueden emerger los sentimientos de soledad y de angustia, acompañados por crisis de confianza e incertidumbre”, comentó Gabriel Rodríguez.

Según explicó el profesional, “esta es una época de mucho movimiento y obligaciones que cumplir y esto puede determinar un aumento del estrés. También se generan gastos excesivos en regalos y en reuniones para celebrar, aumenta la presión económica en muchas personas y hogares”, dijo.

El académico de la Universidad Andrés Bello detalló que las mayores consecuencias para la salud durante las fiestas son los accidentes de tránsito, lesiones traumáticas como heridas cortantes y contusas de diversa gravedad, quemaduras, crisis hipertensiva, cólicos abdominales, paro cardio-respiratorio, desvanecimientos y enfermedad diarreica aguda, entre otras.

Además, las celebraciones son propicias para los excesos de comidas y alcohol.

“Se consume comidas ricas en grasa de difícil digestión, que junto al alcohol provocan problemas estomacales, aumentos bruscos del colesterol, alteraciones del humor, problemas cardíacos y cerebrovasculares que derivan en hospitalizaciones inesperadas”, subrayó el enfermero.