El 1 y 21 de mayo son a juicio del analista político de la Universidad de Los Lagos, Cristóbal Sandoval, fechas claves para la relación del Gobierno de Michelle Bachelet con los movimientos sociales, debido al complejo contexto que deberá afrontar apenas asuma, por las expectativas creadas en torno a su programa.

De acuerdo al cientista político de la principal casa de estudios de la provincia de Osorno, la expectativas sobre la gestión de la presidente electa del país crecerán hasta que asuma, sobre todo porque parte importante de su programa se construyó en torno a las demandas de la ciudadanía a través de los movimientos sociales, los cuales en la actualidad no tienen una conformación tradicional, ligados a la izquierda o a la centro izquierda, sino que se presentan más inorgánicos y espontáneos, similar a los indignados de España.

Por lo anterior, según la opinión de Sandoval, Bachelet deberá tener especial cuidado en el diálogo con tales movimientos sociales, tarea compleja- dijo- proyectando que el primer choque de fuerzas entre su gobierno y estos será el 1 de mayo.

Según argumentó el analista político de la ULA, Bachelet deberá entonces para sortear la situación y evitar una explosión social lograr un buen equipo de trabajo a nivel de Gobierno y sobre todo una gran capacidad de diálogo con el Congreso, para concretar las reformas que prometió durante el periodo electoral.