Dos soldados franceses murieron la madrugada del martes en Bangui, la capital de la República Centroafricana, donde el ejército francés está llevando a cabo una operación militar para restablecer la seguridad en el país, indicó la presidencia francesa en un comunicado.

El presidente François Hollande “se enteró con profunda tristeza de la muerte en combate, la noche pasada en Bangui, de dos soldados franceses del octavo regimiento de paracaidistas de infantería de marina de Castres” (sur de Francia), dijo el comunicado.

Se trata de las primeras bajas francesas anunciadas desde que el jueves empezó la operación “Sangaris”.

“El jefe de Estado muestra su más profundo respeto por el sacrificio de estos dos soldados y renueva su confianza plena en las fuerzas francesas comprometidas, junto a las fuerzas africanas, en restablecer la seguridad en la República Centroafricana, proteger a la población y garantizar el acceso de la ayuda humanitaria”, añadió el Elíseo.

Los soldados franceses iniciaron el lunes el desarme de las milicias y grupos armados, tras una nueva ola de violencia que había causado unos 400 muertos en la capital en tan sólo tres días.

Los grupos armados, que controlaban las calles de Bangui, abandonaron sus posiciones y se reagruparon en un campo de la capital centroafricana, por lo que “la población ya no está amenazada”, había indicado el lunes por la tarde en París el estado mayor del ejército.

La República Centroafricana está sumida en el caos desde que la coalición rebelde Seleka, mayoritariamente musulmana, depuso al presidente François Bozizé en marzo pasado.

Tras la luz verde de la ONU, el ejército francés desplegó 1.600 soldados en la el país para apoyar a una fuerza africana ya presente en el terreno, la MISCA (2.500 soldados).