La Fiscalía de Ñuñoa inició una investigación luego que 417 vecinos del edificio 32 del Condominio Torres de Carlos Antúnez resultaran intoxicados por consumir agua contaminada. La autoridad sanitaria continúa aplicando vacunas contra la hepatitis A, luego que se registraran dos casos sospechosos de portar el virus.

La información fue confirmada por el Fiscal Adjunto de Ñuñoa, Francisco Jacir, quien indicó que el miércoles se recibió una denuncia de Carabineros de la 19 Comisaría de Providencia dando cuenta de los problemas de salud que afectó a vecinos de la torre 32 del condominio, por beber agua contaminada con fecas.

El persecutor señaló que se despachó una orden de investigar a la Policía de Investigaciones, específicamente a la Brigada de Delitos Ambientales.

La investigación apunta a determinar el origen que tuvo el problema, respecto a si tuvo que ver la larga data del edificio o si bien a trabajos recientes. De ser así, indicó que se configuraría un delito contra la salud pública, como adulteración de sustancias de alimentación.

Este ilícito tiene penas de hasta 10 años en caso de existir dolo y multas que pueden alcanzar las 50 Unidades Tributarias Mensuales.

Recordemos que el jueves aumentaron a 417 las personas con problemas de gastroenteritis aguda. La Seremi de Salud Metropolitana, Daniela Zavando, no descartó que estos casos puedan seguir aumentando. Los vecinos manifestaron que las molestias, sobre todo en niños y ancianos, continúan.

Aún se mantienen dos personas adultas sospechosas de tener hepatitis A pero esta información no ha sido confirmada por el Instituto de Salud Pública. De todas maneras todos los residentes están siendo vacunados contra la infección.

El Fiscal, Francisco Jacir, indicó que de confirmarse estos antecedentes serían un agravante dentro de la investigación.