A una pena de 20 años de presidio fue condenado Víctor Águila Nápoli, el llamado descuartizador de Cañete. El joven de 22 años enfrentó un juicio por el homicidio calificado de Rubén Villagra Arias, crimen ocurrido el año pasado, y en el que participó también su pareja Verónica Aguilera Aguilera, quien recibió una pena de tres años de presidio como encubridora.

El fiscal Luis Morales expresó su satisfacción por la dura sanción impuesta por los jueces del Tribunal Oral de Cañete, al acoger las pruebas presentadas por el Ministerio Público. El persecutor dijo que la sentencia era proporcional a la gravedad del delito pepetrado.

En julio de 2012 Aguila asesinó de un disparo en la cabeza a Rubén Villagra, de 26 años, procediendo posteriormente a descuartizar el cuerpo. El macabro hecho fue registrado por la pareja del asesino a través de fotografías y videos captados con un teléfono celular.