El diputado integrante de la Comisión Investigadora del Censo, Felipe Harboe, criticó los resultados de los expertos internacionales, asegurando que ninguno de sus integrantes es especialista en la materia y que fue una consultoría pagada por el gobierno para salvar su responsabilidad.

Una vez conocidos los resultados de la comisión, el parlamentario sostuvo que los integrantes no tienen nada de expertos en el Censo, añadiendo que lo hecho fue una consultoría pagada por el Gobierno y que para salvar su imagen señala que el censo está mal hecho, pero no es repetible.

Una vez conocidos los resultados de la comisión, el parlamentario indicó que la investigación paralela dirigida por la Fiscalía, ya está en la etapa final.

En ese sentido, acusó al ex director del INE, Francisco Labbé de contar a los chilenos una realidad distinta, con datos que no tienen ningún sustento. Agregó que se pagó a asesores y operadores políticos en una maquinación extremadamente grave.

Harboe planteó que se debe hacer un nuevo Censo, aunque abreviado, pues los datos existentes pueden generar complejidades en las políticas públicas a futuro y en los presupuestos municipales.