“¡Un increíble día de caza en Sudáfrica! Perseguí 60 yardas (54,8 metros) a este hermoso león macho…¡qué caza!”, escribió en su cuenta de Twitter, Melissa Bachman, una conductora de programas de caza en la televisión estadounidense, junto a una foto de un león muerto. También compartió la misma imagen en Facebook.

La situación indignó a los cibernautas, quienes incluso elevaron una petición en la página Change.org, donde piden al Gobierno de la República de Sudáfrica que le niegue la futura entrada a Bachman a ese país.

“Melissa Bachman ha hecho una carrera con la caza silvestre, por puro deporte. Sus payasadas son capturadas en gran medida en su sitio web personal: http://www.melissabachman.com/. Es una absoluta contradicción con la cultura de conservación, de la que este país se enorgullece. En su último mensaje en su cuenta de Facebook, ella aparece con un león que acaba de ejecutar y asesinar en nuestro país”, dice la descripción de la solicitud que ya reúne más de 347 mil firmas.

Aunque el león fue aniquilado en un parque de Sudáfrica donde se permite hacerlo y no se incurre en ninguna ilegalidad, muchos lo consideran un acto repudiable.

Por ejemplo, Matt Stopera, columnista de Buzzfeed, explicó con imágenes en un artículo que cazar un león es lo “más cobarde que puedes hacer”.

Stopera señaló -recordando su propia experiencia de un viaje que hizo a África- que los leones son muy tranquilos, duermen casi todo el día y jamás atacan a los seres humanos, es más, los ignoran. Incluso muestra en una foto, que suelen acercarse a las camionetas detenidas para obtener un poco de sombra y que te puedes sacar una foto cerca de ellos perfectamente sin correr peligro.

“La caza de un león no es muy difícil. Para matar a un león tienes que ser un cobarde”, concluye el joven.

Tras la polémica, Maroi Conservancy, empresa que ofrece tours de caza en Sudáfrica y que trabajó con Bachman, defendió la práctica a través de su página de Facebook, según consignó Huffington Post.

Allí señalaron a quienes los atacaban que si no conocían cómo funcionaba la vida silvestre y no habían tenido que ver cómo animales morían de hambre o siendo víctimas de la caza furtiva, deberían abstenerse de hacer comentarios negativos. “Es tan fácil juzgar si vives en la ciudad”, escribieron.

Maroi también añadió que la carne de los animales que eran cazados, es destinada a una comunidad local, y que los fondos generados se utilizaban para ayudar a arreglar un muro en la frontera y así luchar contra la caza furtiva, evitando que se termina la “conservación sostenible”.

Cabe destacar que el león africano se considera “vulnerable”, un paso antes que “en peligro de extinción”.