El conservador diario norteamericano The Wall Street Journal realizó un particular análisis de lo que ha sido el gobierno de Sebastián Piñera, a días de las elecciones presidenciales del próximo 17 de noviembre.

En un extenso artículo, el prestigioso medio comparó la administración del empresario de derecha con el alcalde de Nueva York, Michael Bloomberg, a quienes criticó por su “estilo de gobierno arbitrario y caprichoso”.

Bajo el título de “Chile se dispone a dar un giro hacia la izquierda”, la nota hace referencia a lo que han sido los cuatro años de gobierno de Piñera, que comparte con el edil neoyorquino tener “sucesores provenientes de la izquierda dura”, en alusión a Michelle Bachelet, quien es favorita para volver a La Moneda.

En ese sentido, WSJ asegura que “el ascenso del populismo después de los gobiernos de Bloomberg y Piñera no constituye ninguna sorpresa”, pues a su juicio ambos “se han mostrado reacios a defender los derechos individuales cuando creen que saben más”.

Tras enumerar las “excentricidades” del alcalde norteamericano, destaca los “peligrosos caprichos” de Piñera, como la negativa a la construcción de la Central Barrancones, el post natal de 6 meses, y el aumento de impuestos a raíz del 27F.

“No cabe duda de que el presidente cree que salió de manera brillante de una difícil situación política. Pero hacer caso omiso a un fallo institucional con tal de satisfacer los deseos de la turba fue un error. La oposición se dio cuenta de que lo podía devorar mediante manifestaciones callejeras”, sostiene el lapidario artículo.

Al respecto, la publicación adelanta que Bachelet podría hacer uso de esa polarización social para presionar al Congreso y sacar adelante su agenda legislativa, en el caso que la derecha logre dominar los escaños del hemiciclo.

“Lo más inquietante es que esta autodenominada admiradora de Fidel Castro propone cambios a la Constitución que ampliarían el alcance del Estado y no descarta convocar una asamblea constituyente”, agrega WSJ.

“Piñera parece haber considerado su paso por la presidencia como el de un genio que sale de la lámpara y otorga deseos cuando le viene en gana. Su populismo, no obstante, ha abierto el apetito del público para nuevas concesiones y el debate nacional acerca del rol del Estado ha dado un brusco giro hacia la izquierda”, concluye el artículo.