Un joven ruso clavó este domingo sus órganos genitales entre los adoquines de la Plaza Roja de Moscú, cerca del mausoleo de Lenin, aparentemente para protestar contra la “indiferencia política” de la sociedad rusa.

Después de haberse desnudado completamente bajo una fina lluvia, Piotr Pavlenski fijó un clavo a través del escroto, la piel que envuelve los testículos, ante la atónita mirada de los viandantes de esta gran plaza, muy turística, según imágenes difundidas por internet.

El joven, de 29 años, permaneció sentado con la mirada fija en el suelo hasta que llegaron unos policías que lo cubrieron con una manta y lo alejaron de la mirada de los curiosos.

Pavlenski, originario de San Petersburgo (noroeste de Rusia), fue llevado al hospital y posteriormente transferido a una comisaría de policía, según la agencia Ria Novosti.

Esta no es la primera acción extrema de Pavlenski. En 2012 se cosió los labios en señal de apoyo al grupo contestatario Pussy Riot, del que dos integrantes purgan una pena de dos años de prisión por haber cantado una “oración punk” contra el presidente ruso, Vladimir Putin, en la catedral de Moscú.

La página web de información Grani.ru publicó lo que presentó como una declaración del joven hombre, explicando que su acción –bautizada “fijación” y organizada coincidiendo con el Día de la Policía en Rusia– “podía considerarse una metáfora de la apatía, de la indiferencia política y del fatalismo de la sociedad rusa moderna”.