El seleccionador de Nueva Zelanda, Ricki Herbert, rompió este miércoles las hostilidades de cara al repechaje mundialista contra México (13 y 20 de noviembre) al destacar la “vulnerabilidad” del equipo mexicano y “las dudas” de sus jugadores.

“Es un gran equipo y en un buen día puede derrotar a cualquier equipo ante su público”, destacó el técnico en una emisora de radio de su país.

“Pero he percibido vulnerabilidad, nerviosismo y dudas entre los jugadores mexicanos”, agregó Herbert, quien recordó que el equipo americano sólo ha ganado dos de sus seis últimos partidos.

El seleccionador neozelandés cree incluso que jugar el partido de ida, el 13 de noviembre, en el Estadio Azteca ante 105.000 espectadores podría ser una ventaja para su equipo.

“No estoy seguro que (los jugadores mexicanos) puedan soportar la presión si el ambiente se vuelve hostil cuando lo que se espera de ellos es que ganen”, dijo.

México, ganador del torneo olímpico en Londres 2012 y que ha participado en todos los mundiales desde 1994, disputará el repechaje ante Nueva Zelanda con Miguel Herrera en el banquillo, el cuarto seleccionador en dos meses.

La “Tri” logró con mucho sufrimiento la cuarta plaza de la zona Concacaf (y gracias al triunfo en el añadido de Estados Unidos contra Panamá), sinónimo de tener que ganarse el billete a Brasil en un repechaje contra el campeón de Oceanía.

Nueva Zelanda ha participado en dos Mundiales (1982 y 2010). En Sudáfrica, los All Whites, ya entrenados por Herbert, no perdieron ningún partido, pero quedaron eliminados en la fase de grupos tras tres empates.