Tras años negándose a desaparecer ante la aparición de servicios como Netflix, la cadena Blockbuster finalmente admitió su derrota al anunciar que cerrará todas sus tiendas en Estados Unidos.
Según informó la empresa este miércoles, cerca de 300 outlets y centros de distribución en el país norteamericano bajarán sus cortinas en enero de 2014, ante la imparable popularidad de servicios de alquiler online y el aumento de descargas ilegales.
En palabras de Joseph Clayton, CEO de la cadena de televisión Dish -propietaria de Blockbuster-, “Ésta no es una decisión fácil, pero la demanda de los consumidores claramente se está moviendo a la distribución digital de videos de entretenimiento”.
“Pese al cierre de los elementos físicos de distribución de nuestro negocio, continuamos viendo valor en la marca Blockbuster, y esperamos levantar esa marca a medida que sigamos expandiendo nuestras ofertas digitales”, agregó el ejecutivo según lo consignado por Cnet.
Cabe señalar, que Estados Unidos no es el único mercado de Blockbuster afectado a nivel mundial.
Sin ir más lejos, a fines de octubre los locales chilenos de la cadena que se habían resistido a la retirada, y que no superan los 11 recintos, comenzaron a reducir sus operaciones: aquellos ubicados en La Serena, Concepción y San Pedro de la Paz iniciaron el proceso de liquidación de su stock, previo a su inminente cierre.
Sólo dos permanecerán abiertos en Chile, los emplazados atrás del Alto Las Condes y en La Dehesa, aunque se espera que cierren dentro de un año según informó El Mercurio.
Con estas acciones, Blockbuster comienza a extinguirse sumido casi en el olvido, dejando atrás décadas doradas en las que dominó el tradicional mercado de alquiler de películas.
