Este martes peritos nacionales y extranjeros se reunirán en Santiago para determinar las causas de la muerte del poeta Pablo Neruda, quien falleció el 23 septiembre de 1973, durante la dictadura militar.

Las rondas del equipo especial buscan confirmar si el Premio Nobel de Literatura fue envenenado o murió por causas naturales, según se conoce oficialmente en la actualidad.

Cabe recordar que el ministro en visita del caso, Mario Carroza, envió a Murcia (España) y a la Universidad de North Carolina (EE.UU.) las muestras de los restos del poeta, exhumado el 8 de abril de este año. Dicha evidencia será analizada durante esta semana por el grupo de peritos.

El director del Servicio Médico Legal, Patricio Bustos, liderará las juntas con especialistas de su entidad, así como de la Universidad de Chile y extranjeros.

El abogado querellante del caso, Eduardo Contreras, señaló que la reunión va a permitir un primer análisis respecto a las muestras del examen toxicológico.

En tanto, el juez Mario Carroza señaló que la reunión de los expertos nacionales e internacionales se extenderá desde el martes hasta el viernes.

Las dudas acerca de si Neruda puso ser asesinado fueron planteadas por su exchofer Manuel Araya, quien afirmó que el poeta fue envenenado con una sustancia extraña que le fue inoculada horas antes de su muerte, cuando se hallaba internado en la Clínica Santa María de Santiago, donde era tratado del cáncer de próstata.

Militante del Partido Comunista y entrañable amigo del derrocado mandatario socialista Salvador Allende, Neruda murió doce días después de instalada la dictadura de Augusto Pinochet, el día antes de emprender un viaje a México desde donde pretendía comandar la oposición a la incipiente dictadura.