El grupo canadiense BlackBerry permanecerá independiente y organizó un plan para evitar la bancarrota con aumento de capital por parte de un grupo de inversores liderado por el fondo Fairfax, informó el fabricante de teléfonos celulares el lunes.

Lo anterior, luego de la fallida oferta de compra por parte de Fairfax que ya tenía 10% del grupo y valoraba a Blackberry en 4.700 millones de dólares, la cual venció este lunes.

En lugar de esta compra, Fairfax reunió capital por 1.000 millones de dólares, de los cuales aportará el 25%.

El aporte se producirá bajo forma de incorporación de capital convertible en acciones a un precio de 10 dólares por acción, una plusvalía potencial de 28,7% para los inversores sobre el valor de cierre del viernes.

Blackberry cerró el viernes por debajo de 8 dólares por acción. Esta operación aumenta en 16% el número de acciones en circulación.

La empresa también anunció el despido de su presidente, Thorsten Heins, y que en su reemplazo pondrá a John Chen de forma interina.

Las dificultades de BlackBerry

BlackBerry, pionero de los teléfonos inteligentes, enfrenta serias dificultades debido a fracasos comerciales. La empresa anunció una pérdidas de casi 1.000 millones de dólares en el segundo trimestre y aumentó su plan de despidos a 4.500 personas, 40% de su plantilla.

Para evitar la quiebra, BlackBerry buscaba ser comprada por su principal accionista, Fairfax, a un valor de 9 dólares por acción. Sin embargo, Fairfax no logró concretar el plan.

“Este financiamiento prevé una inyección inmediata de fondos en condiciones favorables para BlackBerry, y refuerzo de este modo de forma sustancial su caja”, explicó la presidenta del directorio de la empresa, Barbara Stymiest.

El grupo de telecomunicaciones busca “los cambios necesarios para reforzar la empresa” y asegurar su continuidad, añadió.

El mercado le dio una fría bienvenida a la noticia y hacia las 14:45 GMT (11:45 horas en Chile), la acción caía 12,23% a 6,82 dólares en Wall Street.

BlackBerry tiene 70 millones de usuarios en el mundo, pero la mayoría utilizan teléfonos más viejos, y el BlackBerry 10 no logra pararse firme en el mercado.