El atentado cometido el lunes en la Plaza Tiananmen de Pekín movilizó a ocho “terroristas” y costó unos 6.500 dólares, aseguró la televisión china.

De acuerdo con la policía china, tres uigures de la región habitada mayoritariamente por una población musulmana de lengua turca lanzaron su vehículo cargado de bidones de gasolina contra la entrada de la Ciudad Prohibida, en un ataque suicida que dejó dos muertos -además de los tres pasajeros- y unos 40 heridos.

La televisión nacional CCTV estimó el viernes que dicho atentado, que según ella fue planificado desde septiembre, había contado con un presupuesto de 6.500 dólares.

CCTV afirmó que el grupo de ocho “terroristas” disponía de armas y estuvo alojado en un hotel del oeste de Pekín. Después, cinco de ellos regresaron a Urumqi, la capital de Xinjiang. Los tres uigires que se quedaron para cometer el atentado utilizaron un vehículo todoterreno Mercedes, siempre según esta fuente.

Por otra parte, más de 50 personas fueron arrestadas en Xinjiang, donde viven millones de musulmanes, afirmó un grupo de defensa de los uigures.

Un portavoz del Congreso Mundial Uigur, Dilshat Rexit, indicó el sábado en un mensaje electrónico que 53 personas fueron arrestadas en esta región autónoma china, que se encuentra en los confines de Asia central, durante operaciones policiales en los dos últimos días.

El atentado en la plaza Tiananmen contó con el apoyo del Movimiento Islámico de Turkestán Oriental (ETIM), una organización considerada terrorista por la ONU, afirmó el jefe de la seguridad china, Meng Jianzhu.

“El apoyo entre bastidores (al atentado) vino del Movimiento Islámico del Turkestán Oriental basado en Asia central y occidental”, declaró el jefe de los órganos de seguridad chinos a una televisión de Hong Kong, según un video publicado la noche del jueves en internet.

Los expertos ponen en duda esta afirmación, señalando el carácter artesanal del ataque y la falta de base en China de los fundamentalistas musulmanes.