La administración de Cruzados SADP, la concesionaria encargada de dirigir las acciones de la rama de fútbol de la Universidad Católica, condenó este lunes el actuar de los jugadores de la Universidad de Chile en el último clásico universitario.

Recordemos que el duelo fue suspendido por el juez Enrique Osses, luego que en el minuto 56 cayera sobre la cabeza de Fernando Meneses un rollo de papel que le ocasionó un TEC simple.

Pero lo anterior no fue visto de buena manera por los jugadores azules. Esto, ya que acusaron al futbolista de la UC de magnificar el hecho con la idea de sacar algún provecho, momento en que también lo insultaron.

Por lo mismo, a través de un comunicado, Cruzados expresó que “lamentamos que ante una situación tan delicada, en la actitud de los dirigentes y jugadores de Universidad de Chile no haya primado la preocupación por la salud de una persona lesionada, y que por el contrario, se lo haya insultado y tratado de agredir”.

Además, la misiva añade que “el fútbol debe erradicar definitivamente todas las formas de violencia y de ninguna manera aceptar que las malas prácticas constituyan ventaja deportiva”.

A continuación, te invitamos a leer el texto íntegro enviado por Cruzados a los medios de comunicación.

Cruzados lamenta y condena los hechos ocurridos en el Clásico Universitario, el cual fue interrumpido en el minuto 56, por la agresión que sufrió nuestro jugador Fernando Meneses, por medio de un proyectil lanzado por la parcialidad local, lo cual le impidió seguir jugando.

Nuestra primera preocupación en esta situación ha sido la integridad de nuestros jugadores, la condena a cualquier agresión física o verbal en contra de ellos, como asimismo rechazamos cualquier agresión contra nuestros adversarios y demás protagonistas de la competencia deportiva.

El fútbol debe erradicar definitivamente todas las formas de violencia y de ninguna manera aceptar que las malas prácticas constituyan ventaja deportiva.

Le corresponde a la ANFP resolver sobre estos hechos y Cruzados ha puesto a disposición de las autoridades del fútbol los antecedentes de lo ocurrido. Estamos ciertos que la decisión se corresponderá con la gravedad de los hechos, las normas y los precedentes.

Lamentamos que ante una situación tan delicada, en la actitud de los dirigentes y jugadores de Universidad de Chile no haya primado la preocupación por la salud de una persona lesionada, y que por el contrario, se lo haya insultado y tratado de agredir.

Posteriormente, funcionarios de Universidad de Chile impidieron a los dirigentes de Universidad Católica el acceso al camarín del árbitro, para tener una versión oficial de los hechos, mientras sí lo hacían el Jefe de Operaciones y Ayudante Técnico de su club y luego su Presidente.

Nuestra preocupación en ese momento era poder llevar a Fernando Meneses a una clínica y poder retirar del estadio con seguridad a nuestro Plantel, lo que pudimos realizar una vez que el árbitro nos comunicó que el partido estaba oficialmente suspendido y que la decisión sobre su eventual reanudación la tomaría el Directorio de la ANFP.

No es efectivo que hayamos concordado la reanudación del partido al día siguiente, lo que por lo demás no corresponde y es contrario al reglamento. La decisión es del Directorio de la ANFP y no de dirigentes, árbitros o funcionarios.