El arzobispo de Concepción, Fernando Chomalí, presidió una misa para rezar por las cinco personas que viajaban en la aeronave que hace dos semanas desapareció tras despegar desde isla Mocha a Tirúa.

Durante la homilía, el arzobispo señaló que es conmovedor el espíritu de solidaridad de las personas ante este accidente tan lamentable. Añadió que nunca se debe perder la esperanza, afirmando que Dios no les abandonará.

Mariela Hahn, hija del piloto del avión perdido, indicó que esperan que con el aumento del plazo de búsqueda haya buenas noticias y encuentren el monomotor.

Mariela añadió que su mamá vino a la misa pero prefiere estar en la isla, lugar donde estuvo toda la vida con su esposo.

La sobrina del piloto, Rosmarie Hahn, añadió que más que nunca la familia se ha unido en la oración y que no se detendrán hasta encontrarlos.

La búsqueda de la avioneta se extendió hasta el próximo viernes anunció la FACH.