Al menos cinco funcionarios de Gendarmería pertenecientes a la cárcel de Osorno debieron ser atendidos en la unidad de urgencias del hospital San José, a causa de un cuadro gastrointestinal. Tras esto, dirigentes del estamento civil de la institución cobijados en Adiptgen llamaron a investigar el hecho.
Se trata de profesionales como un prevencionista de riesgos, un asistente social y además oficiales de la institución, los que tras ingerir alimentos en el casino del centro de cumplimiento penitenciario de calle Amthauer en Osorno, comenzaron a evidenciar los malestares que obligaron su traslado al recinto hospitalario osornino.
El dirigente regional y nacional de la Asociación de Directivos Profesionales Técnico Administrativos de Gendarmería, Raúl Cárdenas, planteó su preocupación por el caso, aduciendo que se trata de una realidad preocupante el hecho que sean los mismo internos que por un beneficio de buena conducta manipulen alimentos en casinos destinados al personal, lo que debe ser revisado, por lo que están a la espera de los resultados que arroje la investigación médica para fundamentar su demanda de establecer diferencias en cuanto a la atención del personal con la población penal.
De los funcionarios atendidos, una mujer debió ser trasladada a la clínica Alemana de Osorno, donde fue evaluada y se espera una pronunciamiento oficial de Gendarmería de Chile.
Los funcionarios que forman parte de Adiptgen anunciaron que los antecedentes serán informados a sus bases nacionales con el objetivo de coordinar estrategias que permitan revertir la práctica que tiene actualmente a los reos preparando los alimentos de sus vigilantes, lo que consideran peligroso, subrayó el dirigente Raúl Cardenas.
