El cricket no se caracteriza por ser un deporte de muchas lesiones, pero aparentemente tendrán que tener más cuidado al momento de celebrar, ya que el lanzador Brad Haddin quedó muy complicado tras ser casi cegado por su compañero James Faulkner.

El domingo, los australianos estaban muy complicados en el juego contra el cuadro indio y los jugadores al momento de celebrar uno de los puntos cruciales del pleito, hicieron el conocido “give me five” o “dame cinco” y en vez de chocar las manos, uno de ellos pasó de largo e insertó uno de sus dedos en el ojo del lanzador.

El deportista tras esta acción cayó al suelo y después de varios minutos de espera logró recuperarse de este extraño accidente, pero que a pesar de terminar el encuentro, es duda para el partido de mañana.

A continuación te dejamos el curioso accidente.
http://www.youtube.com/watch?v=IDK4ININMoU#t=00