En medio del intenso rastreo por alguna pista del paradero de la aeronave extraviada entre Isla Mocha y Tirúa, una embarcación patrullera encontró en el mar un paquete con características de encomienda, cuyo origen se investiga.
El hallazgo se produjo durante las últimas horas de ayer jueves y la información fue confirmada este viernes por el general de la FACH, Iván Travisany, durante su balance de las operaciones de búsqueda del Cessna 172, desparecido desde la tarde del domingo pasado.
El paquete iría dirigido a una persona de Lebu y se sospecha que pudo ser parte del equipaje de la avioneta, sin embargo, todo deberá ser aclarado por peritajes de la Policía de Investigaciones.
“La Armada de Chile encontró una encomienda en el mar, nos envió unas fotos. Iba a nombre de un señor con un número de teléfono. Los antecedentes se los entregamos a la Policía de Investigaciones con el propósito de confirmar o descartar si este elemento iba o no en el avión”, indicó el general.
Sin embargo, la importancia de este hallazgo fue relativizada por Julio Hahn, hijo del piloto de la aeronave, señalando que aparentemente no corresponde a ninguna de las personas que viajaban en la máquina.
Las operaciones terrestres se concentran en el sector Tranicura, a unos 15 kilómetros al sur del aeródromo de Tirúa, en profundas y boscosas quebradas, donde además del ruido que lugareños dijeron oír la tarde del domingo, hay un fuerte olor a combustible, según el testimonio de otros habitantes de la zona costera.
