En los Juegos Paralímpicos de Sydney 2000, la selección de básquetbol de España ganó el oro, pero después de una investigación se descubrió que de los 12 integrantes del equipo, solamente dos tenían alguna discapacidad, lo que los obligó a devolver la medalla.

Esta semana se cumplieron 13 años de aquel hecho que manchó el deporte hispano y que impulsó a que el diario español Marca hiciera un listado de los 10 fraudes de la historia, donde aparece la selección de fútbol de Chile y lo ocurrido en el estadio Maracaná el 3 de septiembre de 1989.

No era el era ella
La atleta alemana, Dora Ratjen, que participó en los Juegos Olímpicos de Berlín en 1936 y que posteriormente en el año 1938 logró el récord del mundo en salto de la longitud en el Europeo de Viena, resultó ser Hermann Ratjen. Según el versión de la atleta, se hizo pasar por una mujer porque los nazis lo obligaron.

Mejor me voy en Metro
La atleta estadounidense Rosie Ruiz, ganó el clásico maratón de Boston en 1980 completando la prueba en 2 horas 31 minutos y 56 segundos, 25 minutos menos que el tiempo que utilizó en terminar la maratón de Nueva York, lo que provocó las sospechas de los organizadores, quienes llegaron a la conclusión que la corredora habría tomado en metro para completar ambas carreras.

La mano de Dios
Diego Armando Maradona, más allá de su talento futbolístico, pasaría a la historia por el gol que marcó el 22 de junio de 1986 a Inglaterra, anotación que fue con la mano y que fue bautizado como “La Mano de Dios”.
http://www.youtube.com/watch?feature=player_embedded&v=gK2z5-cceP4

Vergüenza española
El equipo que presentó la Federación Española de Deportes para Discapacitados Intelectuales para los los Juegos Paralímpicos de Sidney 2000 se llevó el máximo reconocimiento, pero se demostró que todos los jugadores españoles, menos dos, no tenían ningún tipo de discapacidad.

La rivalidad que se fue a las manos
Esto podría estar en las mejores películas de mafia, ya que en los años 90 las patinadoras sobre hielo Tonya Harding y Nancy Kerrigan eran las reinas de esa disciplena en en Estados Unidos, pero su rivalidad llegó al extramo que Harding y su marido contrataron a un matón para que lesionase a Kerrigan para que no pudiese competir en los Juegos Olímpicos de Invierno en Lillehamer. El hombre le rompió la rodilla con un garrote, pero Kerrigan se recuperó a tiempo y ganó la medalla de plata.
http://www.youtube.com/watch?feature=player_embedded&v=N7RvWbnaDZk

El ingenio de un inventor
El pentatleta ruso que compitió en los Juegos Olímpicos de 1968, 1972 y 1976, Boris Onischenko, quedó en las historia debido a si ingenio, ya que se descubrió que durante los JJ.OO. de Montreal en 1976 llevaba un interruptor eléctrico en su florete que le marcaba tocados a sus rivales en las pruebas de esgrima.

Guantes de yeso
En 1983 el poderoso boxeador Billy Collins, quien hasta ese momento había ganado sus 14 combates, recibió una paliza de parte del modesto púgil Luis Resto, tras esto se descubrió que los guantes de Resto estaban manipulados y que combatió con sus vendajes endurecidos con yeso. El autor de la trampa fue su entrenador Carlos ‘Panamá’ Lewis.

La famosa bengala
El 3 de septiembre de 1989 será un día que el pueblo de Chile no olvidará, debido a que en aquella oportunidad, el arquero de la selección Roberto Rojas simuló haber sido cortado por una bengala que cayó desde la tribuna, pero luego se llegó a la conclusión de que lo había hecho él mismo con el afán de suspender el partido que disputaban contra Brasil en el estadio Maracaná por las clasificatorias al Mundial Italia 90. Tras provarse que ésto había sido un engaño, el meta fue suspendido de por vida.
http://www.youtube.com/watch?feature=player_embedded&v=zzN5gYt_hzI

Donde quede mejor la bola
30 años de suspensión y 30.000 euros de multa le dieron al golfista David Robertson, debido a que fue sorprendido colocando la bola donde mejor le convenía durante un torneo de clasificación para el British Open de 1985. Se concluyó que salía antes que sus rivales y arrojaba la bola sin ser visto.